Tal y como lo define este acuerdo un humedal es una zona de la superficie terrestre que está temporal ó permanentemente inundada, regulada por factores climáticos y en constante interrelación con los seres vivos que la habitan.
Los humedales son muy diversos en cuanto a estructura, función y ubicación, pudiendo existir desde en las montañas hasta en los mares de todos los continentes y abarcando pantanos, ríos, lagos, manglares, arrecifes de coral e incluso humedales artificiales como arrozales y salinas.
Cada 2 de febrero se conmemora la Jornada Mundial de los Humedales recordando el día de 1971 en que fue firmada la convención en la ciudad iraní de Ramsar.
El manejo de los humedales constituye un reto planetario y hasta este momento 160 países han contraído el compromiso de mantener las características ecológicas de 994 Humedales de Importancia Internacional y planificar el "uso racional", o uso sostenible, de casi 192 millones de hectáreas de humedales situados en sus territorios. Ecuador que se adhirió al convenio Ramsar en 1991 ha declarado hasta el momento 14 sitios que representan un poco mas de 202 mil hectáreas.
El turismo responsable es el tema para celebrar este año el Día Mundial de los Humedales se trata de una oportunidad para reflexionar sobre el valor de estos ecosistemas y las ventajas que pueden obtenerse de el como atractivo a los visitantes. Es la ocasión también para interrogarse sobre cómo los turistas mismos podemos contribuir a través de nuestro comportamiento al mantenimiento y sustentabilidad del turismo local.
En el humedal Isla Santay declarado como tal en el 2000 situado frente a la ciudad de Guayaquil la población de la localidad y especialmente su juventud están muy entusiasmados con el arranque de sus actividades de turismo comunitario. Gracias al apoyo gubernamental han recibido capacitación y cuentan con dos embarcaciones para el transporte de los turistas. Es un gran logro y una revancha justa tomando en cuenta que durante los pasados 10 años el turismo estuvo en manos privadas externas y poco o casi nada aporto al bienestar local de la población del humedal.
Pero así como el turismo local, manejado a la escala que lo permite la capacidad de servicios y transporte comunitario es una ventaja para la población local, el turismo masivo puede ser un gran problema especialmente por el desarrollo de una gran infraestructura turistica este es el caso de los puentes peatonales que están en estudio y que unirán Guayaquil y Duran con Santay. Una gran presión turistica sobre la isla y sin los controles adecuados pondrían en riesgo los hábitats, animales y plantas del humedal y la población local que depende del mismo.
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